jueves, 18 de febrero de 2016

La tecnología y la importancia de investigar

Este escrito no se refiere a la importancia de invertir o participar en actividades de investigación y desarrollo. Mas bien está relacionado con la búsqueda de información para posteriormente tomar decisiones.

Hace aproximadamente una semana atrás, el 9 de febrero, en el sitio web de Forbes apareció un escrito titulado: Windows 10 Worst Secret Spins Out Of Control. En el mismo se intenta dar una voz de alerta sobre posibles acciones ocultas de Microsoft relacionadas con la privacidad y la captura de información, por parte de Windows 10, sobre lo que los usuarios hacen en sus computadoras.

Para poder denunciar o levantar la curiosidad sobre la transferencia de información, el autor del artículo se basó en una publicación realizada por otra persona que denunciaba los resultados de un trabajo realizado para comprobar que efectivamente Windows 10 transfería información personal hacia servidores de Microsoft.

El artículo, se encontraba muy bien estructurado, de hecho, para el aficionado tecnológico promedio sin muchos conocimientos de comunicación, la información parecía ser veraz y confiable. Además se contaba con la credibilidad necesaria al estar publicado en un sitio de Forbes.

Uno de los lectores que puso atención al artículo, decidió verificar por su propia cuenta la forma como se había realizado la investigación y encontró serias discrepancias.

En un artículo publicado en el sitio ZDnet titulado When it comes to Windows 10 privacy, don't trust amateur analysts, este último autor presenta en forma detallada todos los errores que se cometieron al realizar la prueba que sirvió como base para preparar el artículo aparecido en Forbes.

El artículo publicado por Gordon Kelly en Forbes fue duramente criticado por Ed Bott del Ed Bott Report aparecido en ZDNet.

La polémica estaba montada. Al artículo original se le hicieron varias correcciones. Gordon Kelly nunca hizo mención de los hallazgos de Ed Bott, pero si mencionó un comentario final de Microsoft.

De esta experiencia se pueden rescatar algunos aspectos importantes que debemos tomar en cuenta, si deseamos evitar llegar a conclusiones equivocadas producto de información no tan certera.

En todo momento es importante contrastar la información que se suministra. Vivimos tiempos en los que muchos de los artículos disponibles han sido preparados por personas que escriben como conocedores sin poseer los conocimientos adecuados. Algunos se dedican a repetir lo que otras publicaciones muestran, sobre todo si coinciden con la línea editorial del autor.

Se está a la caza de cualquier tipo de información que conduzca a un descubrimiento de fallas, comportamiento oculto, vulnerabilidades, etc.

El apuro por ser el primero en publicar algo, no siempre va acompañado de una investigación exhaustiva de la fuente que proporciona la información. Además como Internet es tan democrático, la voz se va regando más rápido de lo que se espera. El problema con esto es que esas publicaciones se mantienen, y no todas se hacen eco de aclaraciones, descubrimientos y otro tipo de notificaciones.

Entonces, ¿qué es lo que podemos hacer?. Sencillamente ser precavidos. Tener malicia y verificar la tendencia de la línea editorial de quien preparó el artículo. Si los artículos son muy positivos o muy negativos hacia determinados productos, pues mejor es tener cuidado y cerciorarse de lo que en ellos se argumenta.

Hay que evitar el decidir o sacar conclusiones a partir de la primera fuente de información que se encuentre. Es mejor comprobar o buscar información adicional que valide o contradiga lo que se nos ha presentado.

En todo momento, hay que evitar descartar la información suministrada, aunque esto sea contradictorio. Esto es porque sin saberlo, a veces podemos estar en frente de hallazgos reales con los que hay que esperar que un tercero lo valide o el dueño del producto se manifieste ya sea a favor o en contra.

En fin, como en casi todo en esta vida, no hay que dejar de creer, al mismo tiempo hay que creerlo todo, pero sin creer demasiado.

Amanecerá y veremos.