El artículo que encontrarán en el enlace representa una prueba en la que ser innovador a veces es sumamente dificil. Salirse de la forma de pensar común al parecer es un don o por lo menos requiere de la visión no solamente de quien tiene la idea sino de quien tiene que dar el visto bueno para que se haga realidad.
Este es un don reconocido a Steve Jobs y a muchos otros que en la historia de la tecnología han sabido atreverse a ser diferenets y ver las cosas desde otro punto de vista.
Quizás el ser pequeño represente una gran diferencia en comparación a las compañías cuando son más grandes y tienden a verlo todo en funcion de todas las partes y no una pequeña porción del todo.
Las historias nos sirven para aprender. Nadie tiene una barita mágica para saber o predecir si algo será un éxito o no, sin embargo está demostrado que si las cosas están bien hechas, las probabilidades de éxito son razonablemente positivas.
En la toma de decisiones, por lo general hay dos caminos a seguir y solamente el tiempo es el que se encarga de demostrar si las mismas fueron acertadas o no.
Aquí les dejo el enlace del artículo para que saquen sus propias conclusiones: The inside story of how Microsoft killed its Courier tablet
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